MALAS IMPRESIONES

Tengo un problema. Hoy me voy a Toledo con una chica. La conocí hace ya unos ocho o nueve meses y hablamos todos los días, pero nos vemos hoy primera vez face to face. Sí, la conocí por los mundos estos interneteros.

Hay una relación especial, íntima. No sé si sabéis a lo que me refiero. Supongo que sí. Y se supone que este fin de semana será, en teoría, donde quitemos las telarañas a los cacharros.

Está claro que los dos nos hemos hecho una idea de cómo somos, y hablamos tanto que tenemos un pre-impresión de nosotros mismos. Una pre-impresión positiva, se entiende, si no, no quedaríamos. Pero, aunque me apetece mucho verla y reírme con ella y demás, me da la sensación que no quiero causarle buena impresión. Me refiero a que aunque somos más que amigos, no sé si quiero que esto se vuelva más serio de lo que es. Al fin y al cabo, vivimos en ciudades diferentes y nos tendríamos que ver de pascuas a ramos y demás mierdas. Las relaciones a distancia no funcionan.

A mi lo que me gustaría es que nos lo pasáramos en grande, que nos descojonáramos un rato, que bebamos como cosacos, que comamos como cerdos y que, si tiene que pasar algo, que pase pero sin bulla. Me sabría mal que ella piense en unas cosas y yo en otras y que luego salga herida, porque le aprecio mucho.

Luego, seguro que ella opina lo mismo que yo y lo único que estoy es rayándome en chorradas. Lo que me sorprende y me inquieta es, que si tengo tantas ganas de verla, ¿por qué quiero causarle mala impresión? Doctor, ¿soy gilipollas?

Un beso.