Ha sido unos premios raros, raros, raros. Ninguna de las supuestas triunfadoras (Buried, Balada triste de trompeta y También la lluvia) se han llevado el gato al agua. Al final la que ganó todo lo importante fue Pa Negre del director mallorquín Agustí Villaronga que se llevó nueve, entre los que destacan mejor película y mejor director. Javier Bardem se llevó el Goya al mejor actor ¿alguien lo dudaba? Karra Elejalde se llevó el Goya al mejor actor de reparto por También la lluvia; Nora Navas como mejor actriz; Laia Marull mejor actriz de reparto; Francesc Colomer y Marina Comas como mejor actor y actriz revelación (todos para Pa Negre).
Lo peor de la fiesta fue, en realidad, la entrada de Jimmy Jump justo antes de dar el Goya al mejor actor, ese gilipollas que se dedica a invadir eventos importantes y cargarse bonitos momentos, al que Buenafuente no dudó en llamarlo gilipollas.
Lo mejor de todo fue el manifiesto leído por Álex de la Iglesia, que dejará hoy la presidencia de la Academia de Cine por sus desaveninecias con la Ley Sinde. Tiene cojones que hicieran sentarlos juntos, butaca con butaca después del conflicto. El cineasta dijo, entre otras cosas, que "Crisis en griego es cambio y el cambio es acción. Nadie se podía imaginar hace años a donde nos podía llevar Internet. Internet no es el futuro, es el presente, sirve para que millones de personas se comuniquen. Es la nueva ventana que se nos abre al mundo. No tenemos miedo a Internet. Internet es la salvación de nuestro cine".
El cineasta ha advertido que los internautas son ciudadanos y son el público del cine. "Y esa gente no va al cine porque está delante de un ordenador", ha razonado. De la Iglesia ha admitido que "tenemos que tener en cuenta nuestros derechos" pero ha indicado que no deben "olvidar nuestras obligaciones" ya que la industria tiene "una responsabilidad moral con el público".
Y fuera del Teatro Real, había una manifestación de los Anonyomus abucheando a cualquiera que entrara. A cualquiera excepto a Álex de la Iglesia, que fue el único ovacionado.
Un beso.