CONTRA LOS PARKING

Estoy convencido que cuando alguien se decide a montar un parking, no se lo piden a un arquitecto normal y corriente (si es que los hay). Debe haber un Aquelarre de Arquitectos del Mal que se dedica exclusivamente al diseño y construcción de garajes públicos y privados.

Están hechos como el culo. Los parkings públicos son de chiste. La mayoría que he tenido la desgracia de probar tiene las máquinitas del ticket en curvas lo que hace prácticamente imposible de coger estando sentado normal en el asiento del coche. Para salir o para entrar hay que sacar medio cuerpo por la ventanilla para coger el dichoso papelito. Y hablando de papelitos, ¿alguien sabe para qué sirve el papelito en el Mercadona? Te dan papelitos y luego tienes que usar el propio recibo de la factura para que te abran. Y si no tienes la factura... ¡te jodes!

El Corte Inglés al que suelo ir tiene dos plantas de parking. La primera planta estaría en el quinto sótano y está en una curva contínua. Tienes que tener el volante a las cinco y cincuenta durante cinco minutos para llegar hasta ahí. Como podéis imaginar, al intentar maximixar todo el espacio, los dos carriles que hay para subir y bajar son muy pequeños y al estar en curva es físicamente imposible mantener el coche dentro del carril exacto. También es por donde suben y bajan los camiones de reparto. Cuando suben y bajan, es imposible seguir. Ellos tienen que frenar. Yo también. Y se lían gordos. A veces, como es una curva bastante cerrada, es imposible ver si viene alguien a menos que hagas pitiditos con el claxon. ¿Sabéis cuantas hostias han habido ahí? Demasiadas.

El parking privado es todavía peor. Está lleno de columnas por todos lados. Estoy 150% convencido que el 99% de las columnas no sirven para nada. ¿Para qué sirven? Para dar por culo. No puede ser que a mi izquierda haya una columna, a la derecha otra y enfrente otra. ¿Cómo puede ser? No puedo hacer una maniobra normal para aparcar de culo sin tener que esquivar esa mierda. ¿Por qué tantas columnas? ¿Es para que no se vaya rápido? ¡Es imposible! Con tanta curva y tanto coche incrustado en su plaza de aparcamiento es imposible ir a más de veinte por hora.

Es un infierno. Voy a tener que comprarme un Smart para poder aparcar, no solo en la calle, sino también en los parkings.

Un beso.