DJANGO

Da la sensación que a Tarantino le quedan pocas pelis que hacer ya. Si filmografía se basa en coger estilos de pelis de serie B y convertirlos en pelis de culto. Resultaba extraño que no hubiese hecho su spaguetti-western antes, pero aquí está: Django Desencadenado.

La película está en la línea de Malditos Bastardos. Una película más "madura" y "cuidada" que la gamberrada de Kill Bill. Todavía quedan escenas brutales, pero todo mucho menos "loco" que antes.

Lo peor de la película, sin duda, es la duración. Casi tres horas de película cansa a cualquiera. Sobretodo porque hay muchas escenas que aburren hasta al apuntador y muchas cosas que se podrían haber quitado sin problemas.

¿Lo segundo peor? La música. Las pelis de Tarantino se caracterizan por su música. Si la escena mola, la música la hacía todavía más sublime, pero ahora no. Sí, hay música de Ennio Morricone -obviamente- que me gusta, como The Braying Mule, pero no es el rollo de otras películas. La importancia de esta en la película baja muchos enteros. Igual pasaba en Malditos Bastardos.

Lo mejor sin duda son los actores. Todos lo hacen cojonudamente bien. Christoph Waltz es brutal, el mejor, pero ninguno lo hace mal. Jamie Foxx, Samuel L. Jackson, Don Johnson o incluso Leonardo di Caprio lo hacen sensacional. No hay queja.

Y la historia está bien. Mola. Con las escenas "a lo Tarantino" que tanto nos gustan a todos. Y un inicio de la película, que como en Malditos Bastardos, nos encantará a todos.

A mí me gustó mucho. Con cosas que no, como en todas, pero que es muy recomendable. ¡Es de Tarantino!

Un beso.