Llevo dos semanas sin parar. Sin parar de currar, se entiende.
No me quejo, que conste. Tal como está el país, hago todo lo que me manden... o casi todo. Todo por un puñado de dólares, como diría el gran Clint. Lo malo es que en este trabajo, desgraciadamente no hay término medio. No puedes "desconectar y ya está", es muy complicado. Aquí trabajas día y noche, supongo que por eso tengo tanta cana ya en el pelo.
Lo que de verdad me jode es llevarme el trabajo a casa. Estar todo el día aquí dale que te pego y tener que salir y seguir trabajando, aunque esté en casa. Ver la tele y estar pensando en el trabajo, cenar y estar rayado por el tema, jugar y lo mismo... no te deja tiempo para nada.
Como ya digo, es curro y eso debería ser suficiente estímulo. Pero ante el trabajo infinito, las horas extras no pagadas y que estamos en veranito, uno se desespera.
Un beso.
Escrito por Jake| 5 de Julio 2012 a las 10:33 AM|Joder, lo malo es que sin poder desconectar te va quemando poco a poco.
Supongo que al final no cambiaste de curro como andabas comentando hacía un tiempo ¿no?
El Replicante es Inagotable|11 de Julio 2012 a las 12:25 PMSi cambié sí, pero sigue siendo como hasta ahora.
El Replicante es Jake|12 de Julio 2012 a las 10:29 AM