28 de Julio 2010


ROCKY vs ALI

Murray Woroner era un productor de radio veterano de la Guerra de Corea y apasionado del boxeo que quería averiguar un imposible: ¿quién era el mejor boxeador de todos los tiempos?

Para ello, pidió a 250 periodistas especializados en boxeo que le facilitaran una lista de los mejores pesos pesados de la historia, y una descripción de cada uno de ellos: pegada, estilo, condición y características. Con la ayuda de un ordenador NCR 315 -que contaba con unos entonces imposibles 20 kb de memoria-, Woroner fue elaborando un combate ficticio tras combate ficticio a modo de torneo. Al final, la máquina concluyó que Rocky Marciano, el púgil que se retiró invicto, era el mejor de toda la historia. El productor entregó al legendario boxeador un cinturón de campeón valorado en 10.000 dólares de entonces.

El resultado fue aplaudido por todo el mundo... Excepto por Muhammed Ali. El ex campeón, desposeído de su título por negarse a ser reclutado por el ejército americano para servir en Vietnam siendo campeón invicto de la máxima categoría, consideraba humillante perder el combate ficticio ante James J. Jeffries, un campeón de los pesos pesados de finales del siglo XIX que, para mayor dolor de Ali, miembro de los Musulmanes Negros, se había hecho llamar La Gran Esperanza Blanca. Entre las pataletas de Cassius Clay y una denuncia por un millón de dólares por calumnias, obligaron a Woroner a proponerle un único combate ficticio, a través del NCR 315, entre los que en 1969 eran los dos únicos pesos pesados de la historia que se habían retirado sin perder un solo combate: Muhammed Ali y Rocky Marciano. El productor de radio completó la oferta con unos suculentos 10.000 dólares que Ali, en problemas económicos, necesitaba con urgencia. A cambio, la Super Pelea sería filmada.

El plan de rodaje era el siguiente: grabar todos los posibles desarrollos de la pelea y sus posibles finales. Una vez registrado, las fichas de ambos boxeadores se procesarían a través del NCR 351, que dictaminaría quién, cómo y cuándo resultaba vencedor. Ali, pese a su retiro, se mantenía en forma. Marciano, que había dejado el boxeo 14 años antes, tuvo que ponerse a dieta y calzarse un peluquín para asemejarse al boxeador que fue.

El gran estreno de la película se preparó para el 20 de enero de 1970. 1.500 salas acogieron el evento. Ali, al que aún le faltaba un año para volver a boxear oficialmente, ya tenía su ciberrevancha ante un Marciano que murió en un accidente de avioneta unos cuantos meses antes.

And the winner was... Rocky Marciano. La computadora había dictaminado noquearía a Muhammed Ali en el decimotercer asalto. ¿Qué respuesta encontró el campeón destronado a su ciberderrota? Como siempre, la ironía: "Esa máquina la han debido diseñar en Alabama...".

Un beso.

Escrito por Jake|28 de Julio 2010 a las 03:23 AM|


Comentarios

Precisamente anoche, alla las 3 AM, estaba viendo "Rocky Balboa" donde hablan de ello...y me preguntaba si seria verdad o no.
En cuanto empezase la jornada laboral iba a preguntarselo a San Google...pero veo que no hace falta...

¿Casualidad?

El Replicante es Divadelro|28 de Julio 2010 a las 10:55 AM

Precisamente anoche, alla las 3 AM, estaba viendo "Rocky Balboa" donde hablan de ello...y me preguntaba si seria verdad o no.
En cuanto empezase la jornada laboral iba a preguntarselo a San Google...pero veo que no hace falta...

¿Casualidad?

El Replicante es Divadelro|28 de Julio 2010 a las 10:56 AM

Pues espero que sí, porque si no significaría que tengo poderes especiales. O algo peor.

El Replicante es Jake|28 de Julio 2010 a las 01:36 PM

Aunque el boxeo no me interesa (excepto la peli de "Cinderella man"), sí es una historia interesante.

Un bico

El Replicante es Tuxina|28 de Julio 2010 a las 06:30 PM

Tu obsesión por Russell Crowe es enfermiza.

El Replicante es Jake|29 de Julio 2010 a las 04:46 AM

Estos ordenadores racistas...

El Replicante es Inagotable|29 de Julio 2010 a las 10:51 AM

Todos blancos y pulcros...

El Replicante es Jake|29 de Julio 2010 a las 11:38 AM


¡Al ataque!










¿Debo recordarte?