Y ENTONCES AC/DC

Qué os voy a decir que no sepáis ya: el concierto de AC/DC anoche en el Calderón fue brutal. Cayó una fina lluvia, pero no le molestó a casi nadie, debían ser lágirmas del diablo al ver, emocionado, a sus discípulos musicales.

Al principio, una sucesión de imágenes de un train a toda velocidad, Angus Young tirando leña al fuego para que fuese todavía más rápida y aparecen unas jamonas que le dejan inconsciente e intentan detener el tren, pero no lo consiguen y lo mandan a tomar por culo. En el accidente, aparece el tren por mitad del escenario y os miembros de la banda salen a escena.

"Puedo oler rock and roll" dijo Brian Johnson al principio del concierto. Y tocaron Rock and Roll Train, Back in Black, Dirty Deeds Done Dirt Cheap, Shot down in flames y Thunderstuck. Afortunadamente, del último disco sólo tocaron cuatro y nos dejaron con los grandes clásicos.

A las once de la noche, en el ecuador del concierto, tocaron The Jack, y Angus hizo su habitual striptease, quedándose en gayumbos. Aunque esta vez, en lugar de una bandera, estaba el logo de AC/DC.

Y sonaron las campanas del infierno, Hells Bells. Bajaron una campana negra del escenario y Brian Johnson corrió hasta tirarse encima y hacerla sonar. Luego Shoot to thrill, Shook me all night long, T.N.T y Whola Lotta Roise, que habla de un antiguo rollito de Bon Scott y que apareció, en forma de muñeca hinchable, follándose el tren descarrilado.

Luego llegó Let there be rock y un furioso solo de Angus de veinte minutos increíbles. Y aunque moló mucho, a mi me resultó un poco individualista. Vale, Angus Young y su guitarra es la puta hostia, pero en los conciertos se le da todavía excesivo protagonismo.

Empezaban los bises. Angus apareció de un ascensor escondido en medio del escenario, con fuegos artificiales de por medio y unos cuernos rojos integrados. Eso sólo podía significar una cosa: Highway to hell y se despidió con For Those About To Rock (We Salute You).

Me faltó Stiff Upper Lip y el sonido fue bastante malo, pero qué queréis que os diga: fue la rehostia. Y yo, que llevo unos cuantos días muy sensiblero, me emocioné y todo. Y ahora, con una resaca de la hostia, voy a ver si duermo un poquito. Y después, a hacerme pruebas de paternidad, porque anoche Angus se folló a 55.000 personas con su Gibson SG y sin siquiera tocarnos.

Un beso.

Escrito por Jake| 6 de Junio 2009 a las 11:21 AM|