18 de Octubre 2007


TRENCH DIARIES 2

El problema del canibalismo ha terminado. Gracias a Dios. Al final, el Alto Mando nos envió provisiones para pasar durante una buena temporada. También nos enviaron más hombres. Más armas. Incluso un cocinero nuevo. Aunque Roger le dejó claro, desde el primer día, que él era el Cocinero Jefe y que el otro sería el Pinche Puto.

Coleman el Tarado, como le habían bautizado, había dejado de pasearse por el campo de minas, e incluso decía cosas inteligentes y sensatas. Aunque algunas veces soltaba alguna chaladura, para demostrar que todavía estaba un poco loco y aún era peligroso comérselo.

Algo pasó durante la cena, porque a la mañana siguiente, todas las paredes de tierra estaban llenas de carteles comunistas que alentaban a los soldados a pelear por un sueldo más digno y cosas de ese tipo. Personalmente, mi opinión sobre los comunistas es la misma que sobre los bosquimanos. Nunca he visto a ninguno, por lo que a mi respectaba, no existían.

Desde el principio tenía que haber hecho algo. Haber mandado fusilar al que estaba escribiendo esas tonterías que decían de no se qué pensamiento obrero. Nunca pensé que los hermanos Marx fuesen tan peligrosos.

El día siguiente, la tropa de reconocimiento se negó a actuar. Decían que no les pagaban lo suficiente y que se merecían un aumento de sueldo y un plus por peligrosidad. Dos días después, los vigías hicieron huelga y alegaban que necesitaban un contrato mejor para estar toda la noche despierto. Tres días después, el Pinche Puto se puso en huelga diciendo que Roger le explotaba y que no paraba de trabajar, mientras que el ex presidiario se sentaba en una silla a mirarle.

Soy un hombre razonable, pero no he llegado hasta aquí siendo una hermanita de la caridad. Así que les amenacé a todos a que os cumplían mis órdenes o les haría un consejo de guerra que terminaría con su cabeza en lo alto de una pica. Algunos vacilaron. Pero se mostraron firmes y unidos. Según lo que decía no se quién, para poder luchar contra el poder establecido, debían permanecer unidos en lo bueno y en lo malo. La verborrea anti capitalista del hombrecillo estaba funcionando, porque nadie dio marcha atrás.

Poner en unas trincheras, unos cuantos piquetes es como intentar hacer entrar un elefante por la cerradura de una puerta. No podíamos avanzar. Y además, esos cabrones decidieron tomar como suyo el almacén de armas.

Las trincheras se dividieron en dos. Nosotros controlábamos el almacén de comida, pero ellos tenían la cocina. Nosotros teníamos la munición, pero ellos las armas. Cualquier jugador de ajedrez vería un ejemplo muy claro de tablas. Pero eso era sólo si seguíamos las reglas.

Dos meses de tensiones, me llevaron a una reunión con el recientemente creado Sindicato de los Soldados (SS). El líder sindical era un hombrecillo pequeño y con gafas llamando Henry. Tenía muy claro las ideas teóricas del principio marxista. Pero sus creencias también le hacían creer en la bondad innata del hombre. Y eso fue su fin.

Cuando salí de la tienda de campaña y les enseñé a todos los soldados la cabeza recién rebanada de Henry, la gente empezó a murmurar y a dudar. Las creencias están muy bien siempre que no te lleven a la tumba.

Algunos insurrectos intentaron coger las armas y lanzarse contra los opresores imperialistas. Cuando entraron en el almacén de armas, se encontraron a Roger y a Coleman, armados con dos escopetas. Para que nadie pensara que estaba de broma, el ex prisionero le disparó al cocinero, abriéndole un boquete en el estómago. La cocina volvía a ser suya.

En mi magnanimidad, decidí perdonar a los soldados insurrectos del fusilamiento que se habían ganado por la traición. Al menos, habíamos vencido al comunismo. Pero no iba a ser este, el último de nuestros problemas.

Un beso.

Escrito por Jake|18 de Octubre 2007 a las 02:46 AM|


Comentarios

Que panda de hijosdeputa que son los militares. Afirmo.

El Replicante es fettuchini|18 de Octubre 2007 a las 07:45 PM

¡Fettuchini! Sus experiencias militares le han sacado del cubil en el que estaba escondido.

Cuéntenos historias de su vida en el cuartel.

El Replicante es Jake|18 de Octubre 2007 a las 09:40 PM

Imagine un sitio en el que todo se haga corriendo, deprisa y mal el último día después de haber dejado dormir los asuntos durante 3 meses en un cajón. Pues así a diario.

De todos modos, de mi trabajo como sicario del Doctor Maligno no me puedo quejar, desde que llegué a mi oficina he ganado unos quince kilos que me han devuelto a mi estado nattenido mi mejor forma física de la historiaural de gordura y blandulería después de haber (CASI comenzaba a parecer que podía llegar a tener algun día, con mucho esfuerzo y sacrificio, abdominales).

El Replicante es fettuchini|18 de Octubre 2007 a las 10:15 PM

Vuélvase unos meses al ejército y recupere la mejor forma.

El Replicante es Jake|18 de Octubre 2007 a las 11:02 PM

Ejem, es que sigo ahí. Solo que más gordo y más vago.

Es decir, que me he aclimatado bien al medio.

El Replicante es fettuchini|18 de Octubre 2007 a las 11:25 PM

Pero ya no hace instrucción, ¿no?

El Replicante es Jake|19 de Octubre 2007 a las 12:10 AM

No, ahora lo que hago es una comilona cada 15 días en horas de trabajo (durante mis 6 horas y media de trabajo). Hace dos semanas fue barbacoa de chuletas y panceta. Ayer, paella. Y después, siesta en hora de trabajo para que la vuelta a casa en coche no me vaya a coger con sueño y vayamos a tener un disgusto. Y el resto de los días, pausa para café de cerca de una hora, no sea que me canse.

Si no fuera porque se me está pagando con ellos, estaría indignadísimo con que mis impuestos se usasen para pagar a, como decirlo suavemente, tantísimo vago.

Ah, sí, y mucho facha y algún Torrente por ahí aunque no tantos como imaginaba. Menos mal que estoy ahí, equilibrando la balanza.

El Replicante es fettuchini|19 de Octubre 2007 a las 02:10 AM

Así me gusta, ¡dando ejemplo de lo que soy un verdadero español! (y no el Rajoy de marras)

El Replicante es Jake|19 de Octubre 2007 a las 02:14 AM

Pero ¿cómo pudo disparar Roger si no tenían munición?

No estarás omitiendo detalles, ¿verdad? :P

El Replicante es Inagotable|21 de Octubre 2007 a las 03:18 AM

Ellos tenían la munición. Lo que no tenían eran las armas. Y cuando se escabulleron y entraron en la armería... ¡hop! Armas y munición.

El Replicante es Jake|21 de Octubre 2007 a las 04:11 AM

Esto se pone bueno! Me gusta mucho :)

El Replicante es Zim|27 de Octubre 2007 a las 03:19 AM

Gracias.

El Replicante es Jake|27 de Octubre 2007 a las 07:34 AM

Gracias.

El Replicante es Jake|27 de Octubre 2007 a las 07:38 AM


¡Al ataque!










¿Debo recordarte?