CABRONES SOBREVALORADOS 4

Nombre: Sean Penn.

¿Cuándo?: 17 de agosto de 1960.

¿Dónde?: Santa Mónica, California. EEUU.

Los principios de Sean eran tan patéticos como los de cualquier otro actor. Taps, más allá del honor, que contaba la historia de unos estudiantes militares que se ayudaban para evitar que el colegio fuese vendido a una inmobiliaria; y Aquel Excitante Curso, donde hacía de guionista que se mete en un colegio para ver la mentalidad de los adolescentes, que sólo piensan en ligar.

Después de estas dos basuras de serie B, se casó con Madonna y el matrimonio dio el fruto una "peliculaza", Shangai Surprise. En serio, si no habéis visto este bodrio, tenéis que verlo para daros cuenta de qué actor estamos hablando.

Se divorció de la cantante y protagonizó Colors con Robert Duvall. La película la vendieron con la siguiente frase “En el mundo de los matones, lo único que importa es el color de la piel que tengas”. Luego trabajó para Brian de Palma en una buena película: Corazones de Hierro. ¿El problema? El cásting. ¿Alguien más ve incompatible a Sean Penn y a Michael J Fox?. Luego protagonizó con Robert de Niro aquella comedia, No somos ángeles, en la que se disfrazan de curas y se esconden en un monasterio. Era tan y tan mala, que Tele5 no para de emitirla.

Empezó ha ser un gallito de la industria cuando hizo de secundario de Al Pacino en Atrapado por su pasado, que le valió la nominación al Globo de Oro. Personalmente, de esa película lo que menos me gustan son las actuaciones de los actores. Brian de Palma dirige fantásticamente. Y punto.

Su mejor papel -porque hacía de un hombre que está en la cárcel y cuya cara no cambia de expresión nunca- fue en Pena de Muerte, y fue nominado al Globo de Oro , pero que también perdió. Pero, aun siendo su mejor actuación está a la sombra de Susan Sarandon, que está sublime. Recordemos, Giro al infierno, nominada al Razzie en dos categorías, Luego llegaría la película de Woody Allen, Acuerdos y Desacuerdos con lo que incomprensiblemente sería nominado al Oscar, pero que no ganó afortunadamente. Ahí estaba Kevin Spacey con su American Beauty. Protagonizó esa película “pasto de Oscar”, llamada Yo soy Sam y que era tan insoportable que la dejé de ver a la mitad, y luego ganó el Oscar por Mystic River. ¿Soy el único que se lo hubiese dado antes a Bill Murray por Lost in Translation? En realidad se lo hubiese dado por Los Cazafantasmas, pero como la Academia es tan dada a dar Oscars por las películas que no le corresponden...

Las últimas, mencionar 21 gramos, en la que Sean se marca una de las actuaciones más soporíferas de toda la historia. De hecho, viendo esa peli estaba rezando para que el tío muriese de un infarto y nos pusieran otra vez la historia de Benicio del Toro. Y la última que recuerdo es la previsible La intérprete con Nicole Kidman. Incluso en aquellos dos o tres episodios que salía en Firends haciendo de novio de Phoebe/Ursula lo hacía aburrido. ¡Dále vida al asunto, Sean!

Un beso.