Hoy, el cielo de la gran capital del estado español es gris. Hace el frío habitual y he tenido una presentación de medios en la que la profesora ha sacado el estoque y ha hecho de mi, y de mis compañeros, chop-suey con nuestros órganos.
La cuestión es que he estado en la Uni "demasiado" tiempo, porque después de la presentación en cuestión me he quedado a comer en la Uni y, lógicamente me he sentado con gente de la clase para charlar de cosas superfluas (atención querido lector, no se escribe SUPERFULO, sino SUPERFLUO). Entre plato y plato (spaguettis asquerosos y pollo con patatas con más hueso que carne. sí, ya sé que debería haber pedido el bocadillo del día, pero hoy estaba especialmente espeso) así que como buena gente hemos estado marujeando sobre la "otra" gente de clase (es decir, los que no estaban aquí).
La conversación era bastante parecida a las salidas en Al salir de clase, así que no lo voy a repetir. Pero lo bueno ha llegado cuando hemos estado hablando de una chica en cuestión, a la que atribuíamos pocos romances,ligues, rollos o lo que sea cómo se llamen (no he encontrado nada mejor en la RAE) que estaba... "interesada" (la RAE no sirve para estas cosas) en un colega de clase.
La cosa es normal hasta este punto, lo que me ha hecho pensar es que en primero de carrera el caso era al revés.. ¡Sí, queridos lectores, como lo oyen!. Pero ahoras los sentimientos de él se han enfriado un poco y.. vamos, que no hay nada que hacer.
Entonces mi mente ha vuelto a funcionar a marchas forzadas, escupiendo un ensordecedor ruido por culpa de las clavijas y tornillos mal engrasados, y me he preguntado cosas tan filosóficas como: ¿cómo es posible que haya pasado una carrera tan rápido?.
Dentro de unos meses, a estos chicos y chicas a los que veo todos los días, ya no los volveré a ver nunca mais (o eso creo), y eso ensombrece un poco más el hecho de que por fin acabamos. Por que he estado hablando con la gente y están contentos por terminar esto y ponerse a currar, sin pensar en el hecho de que no nos volvamos a ver, es decir, que SABEN que no nos vamos a ver, pero no les importa mucho. Lo cual ha hecho que me replantee unas cosas:
1º Cuando entré en el mundo universitario pensaba que quedaba mucho para el final. Nunca preste suficiente atención a las cosas importantes, y supongo que tendría que haber dicho cuatro cosas más de las que he dicho, pero que siempre pensé que podría decir otro día.
2º ¿Quizás mis lazos de amistad son demasiado cortos o simples o yo-que-sé que, que realmente no se pueden considerar colegas DE VERDAD (es decir, me refiero a esos cuatro o cinco colegas únicos e intransferibles a los que les cuentas absolutamente todo)?
3º ¿Se puede empezar a enmendar algo esto, es decir, si no me he llevado bien (o no me he llevado en absoluto) con alguien, se puede, de repente, hacer colegas de verdad o está prohibido por esos extraños códigos morales que tenemos en la cabeza? Yo por ejemplo, probbalemente no me relacionaría mucho con alguien con quien no me he llevado nada durante toda la carrera, pero, si habeis leído el post en el que digo lo que tengo en Mis Documentos, os dareis cuenta de que soy algo excéntrico (dicho finamente) y mis conclusiones suelen no ser válidas.
4º Quizás, como me pasó cuando tenía que acabar el colegio, tenga una especie de miedo o de morriña a la fácil vida de estudiante?.
Espero que todas estas dudas se resuelvan rápidamente.
Hasta el próximo bat-capítulo, en la misma bat-hora, en el mismo bat-canal.
¡Un beso a todos!